¿Será bueno llevar al psicólogo a mi hijo(a) y en que me puede ayudar?
Muchas veces los padres tienen la duda de si será bueno o no llevar a los niños(as) a terapia y desde que edad será bueno consultar. Una de las ideas o creencias que sustentan el no llevarlos es “es muy chico(a)y no se da cuenta”, esta idea es muy perjudicial dado que desde la primera infancia los bebés se dan cuenta de lo que sucede a su alrededor y sienten las mismas emociones que sentimos los adultos, lo diferente es que no tienen el lenguaje como un recurso que los ayude expresarse, por lo que su forma es el llanto, dificultades en el sueño, en la alimentación cuando son bebés y cuando comienzan a crecer puede ser las “pataletas”, o problemas conductuales y de adaptación en el jardín, colegio y/o casa.
El que los padres obtengan mayor información respecto a la infancia y de como responder frente a las demandas de los hijos permite entregar una mejor respuesta y así evitar que se generan patrones de conducta que pueden provocar sufrimiento alos niños y sus padres, determinando el vínculo que existe entre ellos, por lo que consultar tempranamente es una inversión en la salud mental de niños, jóvenes y sus familias.
Por otro lado, cabe mencionar que en la actualidad en donde hay desafíos y exigencias cada vez mayores, creemos que es necesario que familias y establecimientos educacionales puedan obtener apoyo y orientación respecto de cómo manejar y adaptarse a los constantes cambios a los que nos vemos expuestos. Por ejemplo, en buen uso de la tecnología, apoyar en la información entregada por los medios de comunicación, guerras a nivel mundial, a nivel social y enfermedades, separaciones, fallecimientos, cambios entre otros a nivel familiar. Muchas de estas situaciones generan dolor y no hemos sido educados en cómo manejar las emociones que aparecen, por lo que es común ahora ver crisis de pánico y de angustia incluso en niños.
Desde este punto de vista, creemos que es fundamental contar con espacios de apoyo que nos permitan elaborar lo que sucede a nuestro alrededor y aprender a regular nuestras emociones que emergen con el fin de mejorar nuestra calidad de vida y adaptarnos al entorno de la mejor manera posible.
Los tratamientos en nuestro centro se realizan con el foco de generar vínculos nutritivos y de confianza. Trabajamos con los distintos actores y estamentos que rodean a jóvenes y niños brindándoles pautas y estrategias para su mejor desarrollo y adaptación.